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lunes, 14 de febrero de 2011

En resumen.

Los días publicitarios como éste, igual como el día de la madre, del padre, del abuelo, del niño, del amigo, de la secretaria, del profesor, o del perro y del gato. La verdad,  no me atraen.
No soy del tipo de persona que se vuelve loca por ir a comprar regalos.
De niña, recuerdo, que en el colegio nos enseñaban el valor de los regalos simbólicos, de lo invaluable que pueden llegar a ser las cosas hechas por una misma, porque todo va en el cariño con que se haga.
Es el gesto el que vale y no el precio comercial de un objeto.
Para los 10 de mayo, le confeccionaba a mi mamá unas tarjetas coloridas con cosas que se me ocurría dibujar y escribirle que a ella la conmovían hasta las lágrimas, cosas que me salían desde el corazón y que se las expresaba por escrito, las mismas que no era capaz de decírselas en persona durante cualquier otro día del año. (Ese siempre ha sido uno de mis defectos: se me hace más fácil escribir las cosas que decirlas.)
Y como mujer, ahora que me siento enamorada, tampoco soy exigente. Con simples y genuinas palabras nacidas del alma, me bastarían. Un gratuito gesto de estar a la hora acordada en punto, sería suficiente para saberme feliz.
Es tan fácil como sencillo hacerme sentir bien. 
Habría sido mi mejor regalo, incluso para mi cumpleaños.
Quizás si fuera una bruja mala, exigente, energúmena, que se altera y enoja por absolutamente cualquier cosa que le parezca mal, quizás tendría sin pedir la Luna y el Sol a mi nombre, y al resto del firmamento estrellado en mi cuenta bancaria.
Claro, pero también tendría que ser una top model.
Como decía Sócrates: "Que se diga de tu mujer  que la pudiste escoger  más bella, mas no mejor".
Por qué buscar complicarse la vida, cuando se ha hallado a alguien que la puede simplificar?
No entiendo.
Debe ser tal como decía Lope de Vega: "...beber veneno por licor suave, olvidar el provecho, amar el daño, creer que un cielo en un infierno cabe, dar la vida y el alma a un desengaño, esto es amor; quién lo probó, lo sabe."
Resumen del axioma:
-El amor es idiota.

1 comentario:

  1. totalmente de acuerdo me carga que me tengan que recordar con una tarjeta comercial el día que llega, no hay nada como expresar los sentimientos sin esperar el día en el calendario y el de la oferta...

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